
Es recomendada, en las dosis adecuadas, para que la consuma toda la familia, incluidas personas con diabetes e hipertensión.

Está libre de blanqueadores, procesos
químicos y conservadores. Contiene, en
distintas proporciones, los oligoelementos
que son necesarios para el buen funcionamiento del cuerpo humano, pues no está refinada.

Posee más de 90 minerales en estado puro, todos grandes aliados para el buen
funcionamiento del organismo.


Contiene 30% menos sodio
que la sal de uso común.

Los oligoelementos son sustancias que el
cuerpo humano es incapaz de producir, pero que son vitales para las funciones respiratoria, digestiva, muscular, etc. Entre los más importantes se encuentran el hierro, cobre, yodo, zinc, níquel, litio y silicio.
